Los torquemadas y el desprecio por el contexto

Nos guste o no, en todas las sociedades existen colectivos que, por una razón o por otra, viven con más dificultades, son excluidos social y laboralmente y tienen que cargar sobre sus hombros con terribles lacras. Con la llegada de la corrección política, en un intento de acallar las voces de la mala conciencia y de ocultar los problemas, amplios sectores de los grupos sociales imperantes han tratado de sustituir las palabras que designan a estos colectivos por otras que consideran neutrales y, por tanto, no ofenden a quienes designan. Sin embargo, resultan de este intento palabras vacías, carentes de coherencia conceptual y que hilan un discurso inabordable por lo vacuo de su significado.

Sin embargo, estas teorías acerca del lenguaje no han quedado relegadas a los círculos políticos y universitarios de donde surgieron, sino que han conseguido hacerse un hueco en el discurso de muchas personas. Tal es el caso que algunas editoriales están empezando a sustituir palabras que consideran ofensivas por otras aprobadas por la corrección política. Valga como ejemplo la conocida obra de Mark Twain Las aventuras de Huckelberry Finn. En ella, la palabra “nigger” aparece en más de 200 ocasiones. Hace dos años, la editorial Newsouth books decidió volver a publicar el libro sustituyendo “nigger” por “esclavo”.  La razón que se esgrimió fue que el término «nigger» es peyorativo y podía herir las sensibilidades de la población negra.

Sin embargo, las palabras no son las que hieren, sino el contexto en el que se pronuncian. Así, cuando los miembros del ku-klux-klan golpeaban a los negros a grito de “nigger”, podemos hablar de un contexto racista, y por tanto de un uso racista de la palabra. En cambio, cuando dos chavales negros se encuentra en el Bronx y se llaman “nigger” el uno al otro, estamos ante un contexto cordial y amistoso, por lo que la palabra pierde su connotación racista.

Lo mismo ocurre con la palabra “maricón” en español. Si un grupo de skinheads apalea a un travesti a gritos de “maricón”, se hace un uso homófobo. Pero yo he asistido a contextos en los que dos amigos homosexuales se han dicho “¿qué dices, maricón?” con una intención totalmente cariñosa, por lo tanto la palabra “maricón” no es homófoba per se.

Pese a la evidencia de estos hechos, sigue creciendo el número de personas que favorece la censura del lenguaje y toma los conceptos desde la entelequia de una generalidad que no existe. Las palabras no toman vida aisladas, sino unidas a un contexto que las hace válidas, por lo tanto es al caso concreto a lo que tenemos que atender para formarnos una idea de las cosas.

Las razones que llevan a censurar las palabras son esencialmente dos: por un lado, la existencia de ciertas realidades desagradables, como la pobreza, el racismo, la violencia, lleva a muchas personas a escudarse tras la aparente neutralidad de un término para ignorar la realidad. Sin embargo, esto sólo oculta la realidad en el aspecto psicológico, para ahuyentar los sentimientos de culpa, pero no hace desaparecer las realidades incómodas. Así, los nuevos eufemismos adquieren las cualidades negativas que en principio neutralizaban, como ocurrió con asilo de ancianos, que primero se transformó en hogares de la tercera edad y más tarde en centros de mayores.

Por otro lado, estas tendencias provienen, a mi juicio, de dar respuestas equivocadas a preguntas equivocadas. Se pregunta: ¿Qué opina usted de las drogas? ¿Es usted de izquierdas o de derechas? La trampa de estas preguntas radica en su simpleza. Cuando concebimos las palabras de manera aislada, la única información que tenemos de ellas es una imagen mental, estereotipada y centrada en la estética que produce, como toda imagen. Esta realidad incapacita al sujeto a la hora de profundizar en las cuestiones, pues su única herramienta analítica es la emoción que le induce la imagen evocada.

Ahora los torquemadas del lenguaje apuntan con el dedo a quienes utilizan un lenguaje desnudo y los acusan de racistas, homófobos y machistas, de no cubrir las partes pudendas con el ropaje de la autocensura. ¿Cambiarán la hoguera por un tachón en nuestras producciones? ¿Volverá a causar espanto la desnudez, lo natural y la realidad de las cosas?

Lo que los libros contienen.

Antes en piedra, en papiro, luego en papel y ahora electrónicos, han sido los mejores ayudantes del progreso, de la evolución biográfica del hombre. Esos contenedores del lenguaje, y por tanto del pensamiento, de la integridad humana, han logrado transmitir de generaciones a otras, de siglos a otros, los descubrimientos y vivencias de los hombres, permitiendo extender la vida de estos hacia nosotros, convirtiéndolos en inmortales, al tiempo que nuestra vida se agranda. A través de la literatura, la humanidad se perfecciona y se inmortaliza.

Novelas, ensayos, manuales, tratados. Los libros permiten, sin coste alguno, acceder a los pensamientos de otras personas, a otros mundos, incluso fantasías nunca imaginadas. Por así decirlo, a través de ellos, podemos, por un instante, atravesar la puerta intergaláctica, dejando de ser por un momento nosotros mismos, y vivir en primera persona, otras experiencias, lugares, sensaciones, sugeridos por otra.

Siempre de la mano de nuestra imaginación, lo que hace todavía más saciable la lectura. A través de las letras, palabras, frases y párrafos, podemos recrear caras, colores, lugares y sensaciones, en consonancia a nuestra forma de ser, que va cambiando continuamente, como si de un río, por donde corren palabras, se tratase.

A través de los libros otras personas pueden poner en común sus mundos, reales o imaginarios, y enriquecer así al resto. Se acceden a diversos puntos de vista, a diversas formas de observar la realidad y el mundo, y mundos muy diferentes, que van, holísticamente, solidificándose en nuestro ser. Las lecturas nos dan la posibilidad de humanizarnos, de convertirnos en la persona que queremos ser, y que todavía no somos.

Asimismo, permiten ampliar nuestro lenguaje y vocabulario, que no son más que herramientas del pensamiento (lo más importante en el hombre), abriéndonos los ojos e incrementando nuestras posibilidades de “arquitecturar” nuestra vida y la forma de comunicarnos.

Para mí, un rato de lectura es una especie de laboratorio vital, donde pueden ponerse a prueba diversos comportamientos, caracteres, principios, deseos e incluso formas de pensar. Algo así como un sueño, un aprendizaje vital continuo, una “hipertrofiación” de la vida.

Los escritos nos permiten sobreponernos a las circunstancias, superar las fatalidades. Si se ha nacido en un ambiente hostil, y se ha recibido una educación perjudicial, un libro puede hacernos abrir nuestros ojos de forma exponencial, y ver las diferentes alternativas que acontecen a nuestro alrededor. Si se ha nacido en un país pobre y no se es consciente de tal pobreza, porque no se conocen otros mundos, un relato de otras formas de vida, pueden hacernos una idea de dónde se vive.

Cuando uno lee La ciudad y los perros de Mario Vargas Llosa, uno ya no es el mismo, al descubrir que el respeto ciego a la autoridad, por parte del teniente Gamboa, puede desencadenar en una de las más indeseables de las tragedias. Tras leer 1984 de Orwell, una persona descubre el gran horror de la privación de la libertad y de la individualidad, por parte de los poderes públicos. Luego de entender las ideas de Nietzsche, uno ya no ve nunca con los mismos ojos al cristianismo, uno ya no ve la “bondad” como algo sumamente positivo. Cuando uno lee ensayos como La rebelión de las masas de Ortega y Gasset, uno cae en la cuenta de que la historia puede no seguir una evolución constante, que pueden existir altibajos, que incluso podemos involucionar; que el incremento del número de personas puede acarrear una disminución de la calidad humana, y del valor del individuo.

Las buenas obras suelen tener algo en común. Tras su lectura uno tiene la sensación de que ha recibido un buen golpe en la cabeza con el mismo, de haber provocado una revolución en las ideas de la persona, y todo ello a través de nuestra propia imaginación y nuestro propio pensamiento.

Los libros solo inducen pensamientos e ideas. De ahí que los libros, al igual que la libertad, pueden convertirse en un arma de doble filo; siempre depende del lector.

Al igual que los libros, el aprendizaje de un lenguaje enriquece enormemente a la persona. En cuanto alguien comienza a entender poco a poco un lenguaje,  va descubriendo poco a poco que la escala de valores de los hablantes de una determinada lengua es diferente de la de otra. El gran número de palabras de una lengua dedicado a la naturaleza, indica cuán importante es la misma para tal cultura. Una persona, aprendiendo otras lenguas, no hace otra cosa que aprender diversos modos, de los infinitos que pueda haber, de observar, analizar e interrelacionarse con el mundo. Y qué duda cabe, que cuántas más diversas formas se conozcan, más criterio, más íntegra será la persona, y más capacidad de elección tendrá la misma.

Todo, pues, queda en los libros, testigos de la vida y de la historia. Lenguas antiguas ya desaparecidas, siguen ahí impresas. Descubrimientos científicos milenarios siguen ahí sosteniendo el castillo de la humanidad.

Lecturas recomendadas 2010 (III)

Así habló Zaratustra, el clásico libro de Friedrich Nietzsche, presenta al mundo la nueva moral que adopta el superhombre tras la muerte de Dios.

En forma de novela, Nietzsche, a través del antiguo filósofo persa Zaratustra, establece una nueva moral, la moral de los hombres que dominan por la voluntad de poder, que se sobreponen a la muerte de Dios y destruye la antigua moral cristiana, ya que ésta se empeña en exaltar los valores de los débiles de espíritu, a saber, el odio, el resentimiento, la caridad, en detrimento de la fuerza y el egoísmo.

Para mejorar, el superhombre debe encontrarse en constante conflicto, ya que de la competitividad nacen las mejoras y las expansión de poder, por eso conviene mantener a los enemigos cerca.

También se expone la idea del eterno retorno, que sostiene que tras la muerte, lo vivido se volverá a repetir exactamente una y otra vez, de manera que es la vida terrenal la que realmente importa, y no la celestial que propone el cristianismo, porque esto conduce a una minusvaloración de la vida física.

Esta obra no es simplemente un portento de la filosofía, sino que es considerada una de las mejores obras escritas en alemán. El valor de este libro se duplica si nos situamos en el contexto histórico en el que surgió, donde un filósofo corrosivo y mordaz dio espectacular giro a la moral de la época y colocó al hombre como centro de su conciencia, desplazando a Dios de la misma.

Asesinato en el Orient Express: Cuando hace unos meses visité Madrid, tuve la ocasión de ver «La Ratonera» de Agatha Christie representada en el teatro Reina Victoria. La obra me cautivó de tal forma que decidí leer más sobre esta mujer y el resultado fue este libro.

La trama es la habitual en sus relatos, en el invierno de 1939 el Orient Express, con los personajes más variopintos viajando en él, se queda atrapado por la nieve. Ese mismo día por la noche se produce un asesinato, de manera que el asesino no ha podido escapar. Como es habitual en las novelas de Agatha Christie, hay un detective merodeando la escena y es el que se encarga de la investigación posterior.

La historia mantiene la intriga hasta la última página literalmente, y como de costumbre, llegaremos a sospechar de todos y cada uno de los personajes puesto que todos tienen una coartada perfecta para el asesinato, lo que añade más misterio a la historia.

El libro se lee en un par de tardes como máximo y es bastante entretenido para el que quiera sumergirse en el mundo de Agatha Christie.

Puedo afirmar sin el más mínimo atisbo de exageración que este es uno de los mejores libros que he leído en mi vida. La recomendación me la hizo Fran, colaborador también de este blog. Mis más sinceras gracias a él, pues.

Alice Gould, la protagonista, es internada en un manicomio por supuesta paranoia. Pero cuando los médicos comienzan a tratarla se dan cuenta de que es una mujer de extraordinaria inteligencia y elegante retórica, lo que hace sospechar a algunos acerca de su estado. La paranoia de Alice la hace creer que es una detective que ha ingresado en el manicomio exclusivamente para investigar un asesinato. Un personaje clave es su marido, que ha sufrido varios intentos de envenamiento por parte de Alice, aunque esta lo niega, simplemente piensa que es un ser inferior que se aprovecha de su riqueza.

La creencia o no en la locura de Alice es un tema abierto sobre el que el lector oscilará durante toda la novela, debido a la constante aparición de cambios bruscos que dan vuelcos a la historia. Sin embargo, como cabría esperar, el autor no nos revela al final si la mujer estaba realmente loca.

Recomiendo encarecidamente este libro puesto que apasiona en cada una de sus páginas, el lector no podrá parar de leerlo y además se recibe un gran aporte cultural debido a los conocimientos que tienen los personajes. La representación que hace Luca de Tena de los locos ingresados en el manicomio es de gran fidelidad y no se anda con tapujos para narrar hechos que provocarían incluso en las personas más frías enternecimiento, asco o empatía.

Otra de las maravillosas propiedades del libro es que hace aflorar todo tipo de sentimientos en su estado más álgido, y la mayoría de los personajes no dejarán indeferente a nadie.

El sueño del celta (Mario Vargas Llosa)

Si tengo que recomendar una lectura para el venidero 2011, ésa es, sin duda, la flamante novela del reciente Premio Nobel Mario Vargas Llosa, El sueño del celta.

Trata de la vida de un personaje real, Roger Casement, un inglés que dedicó todos sus esfuerzos, olvidando su salud psíquica y física sobre todo, a hacer realidad dos de sus sueños: acabar con los horrores del colonialismo y conseguir la independencia de Irlanda, región a la que sentía un apego indómito, lo que le granjeó numerosos enemigos.

Todo empezó cuando Roger se alistó a una compañía cauchera, creyendo que, así, occidente traería el progreso a los indígenas, todavía instalados en la prehistoria. Rápidamente, se dió cuenta de que la realidad distaba mucho de eso y comenzó a encararse con los que abusaban de los nativos que les propinánban chicotazos, maltratándolos e incluso amputándole miembros, con tal de obtener más caucho. Luego, preparó una serie de informes, que resultaron serle una arma de doble filo: por un lado, consiguió un nombre en la sociedad además de paralizar el inicuo colonialismo; por otro, fue recabando enemigos que terminaron dejándolo en un lugar desacertado.

Cuando Roger creyó el asunto colonial finiquitado, lo olvidó de lleno y se dedicó profusamente a conseguir la independencia de su amado país. Para ello, intentó ayudarse del contexto internacional: La Primera Guerra Mundial. Intentó aunar los esfuerzos de Alemania e Irlanda para combatir a Gran Bretaña, pero los esfuerzos resultaron fútiles: ni los irlandeses aceptaban la acérrima idea de Casement, ni los alemanes estaban interesados.

Vargas Llosa, ha sabido perfectamente escoger el contenido de su obra. Un personaje proteico, a la vez nacionalista y anticolonialista, defensor de los derechos humanos y con un cierto controvertido homosexualismo, que no dudaron en utilizar sus detractores para mancillarlo. Novela humanísima, moral, sentimental, histórica e incluso filosófica.

En cuanto al estilo, el tiempo no es cronológico: utiliza dos líneas temporales, iniciando por los últimos días de Roger, para luego seguir por las primeras peripecias del personales y, posteriormente, retomar el final de Casement. Las dos lineas temporales convergerán en el final de la obra.

Sin duda, descollante.

Lecturas 2010 (II)

Como agua para chocolate es una novela envuelta en un manto de manual de cocina que cuenta una historia de amor y pasión en tiempos de la Revolución Mexicana.

La autora va conjugando con gran exquisitez la historia con diversas recetas de cocina que funcionan a modo de metáfora de acuerdo con el capítulo al que corresponde.

La protagonista, Tita, es la hija menor en una familia mexicana tradicional. La madre se encuentra mayor y necesita una persona que se encargue de cuidarla. La tradición familiar dicta que la hija menor será la encargada de cuidar a la madre en cuanto se quede viuda. En este caso la responsabilidad recae sobre Tita. Ésta se enamora de Pedro, pero es un amor imposible, ya que al pedirle la mano a la madre, ésta se niega amparándose en la tradición familiar. Entonces es cuando le ofrece a la hermana mayor, Rosaura, y se casa con ella, hecho que sumió en una gran depresión amorosa a Tita. Pero Pedro estaba realmente enamorado de Tita, así que se convierten en amantes. La historia está plagada de pasión, sufrimiento, rencillas hasta tal punto que llega a recordar con considerable constancia al desarrollo de una telenovela.

En el trasfondo de la obra se puede observar un fiel retrato de la sociedad mexicana de la época y de cómo una tradición familiar insana retiene a la protagonista y la priva de un amor por el que lucha encarnizadamente hasta la desesperación. En conclusión, una obra bastante recomendable para los amantes de las novelas pasionales.

El arte de la guerra es un libro de estrategia militar escrito por el general chino Sun Tzu. En él el autor nos ofrece varias técnicas de claro signo oriental para triunfar en la guerra. Sin embargo, a la obra se le pueden dar varias interpretaciones para el ámbito empresarial, político o simplemente para convertirse en el cabecilla de cualquier grupo de personas. A pesar de contar con más de 2500 años a sus espaldas, este libro mantiene todavía hoy su carácter de actualidad, ya que la guerra, la competencia y el liderazgo son consideraciones intempestivas.

Cámara de Gas de John Grisham es un reflejo de lo que viven cada año varios centenares de presos en los Estados Unidos: el corredor de la muerte. John Grisham nos tiene acostumbrados en todos sus trabajos a historias con el mundo jurídico como telón de fondo. En éste, Sam Cayhall, un estadounidense abiertamente racista y antisemita ex miembro del Ku klux klan, coloca una bomba en un buffet de abogados para acabar con la vida de un abogado judío, pero los caprichos del destino prefieren que sean sus dos hijos pequeños las víctimas del atentado. Sam es arrestado y condenado a pena de muerte por un jurado popular. Pero de repente emerge del pasado un abogado dispuesto a ayudarle, Sam no podria tan siquiera sospechar de quién se trataba. A partir de aquí se iniciará una batalla de apelaciones, retrasos y conflictos jurídicos para rebajar la condena por parte de unos, y ejecutar cuanto antes la pena por parte de otros. Entretanto, el protagonista sufrirá la agonía consecuente a la espera en el corredor de la muerte.

El libro pone encima de la mesa la pena de muerte, tema de vital importancia en los Estados Unidos, donde existe un gran conflicto entre partidarios y detractores, además de una reflexión sobre el largo proceso que sume en la desesperación al condenado y sus familiares.

Lecturas recomendadas 2010

Queridos lectores, el presente año ha sido extraordinariamente generoso para mí en cuanto a lecturas se refiere. Aunque en el futuro la cifra se multiplicará, 25 han sido los títulos que han pasado por mis dedos y que me gustaría comentar en esta pequeña sección donde los abarcaré desde el máximo número de perspectivas posible. La sección se dividirá en varias partes con diversas obras cada una que iré presentando a lo largo de este mes de diciembre. Hoy es el turno de las tres siguientes:

1.- En primer lugar, esta fenomenal joya literaria de Federico García Lorca. Aunque se trata de una obra de teatro, tuve que acceder a ella a través del papel por motivos de localización. Está claro que la representación gana mucho color, sin embargo a base de imaginación se puede disfrutar a un nivel parecido. El tema central es el mismo que ocupa toda la obra lorquiana, es decir, la pasión y los celos tan apegados al amor. La historia se desarrolla durante una boda en la que la novia decide fugarse con su verdadero amor y el novio, despechado y dolido, corre tras ellos para salvar su honor, otro de los valores tan presentes en este tipo de obras. El desenlace estará lleno de sangre y violencia, como su título nos anticipa.

En mi opinión, pocos autores gozan del privilegio de poder retratar los sentimientos más pasionales con tal exquisitez, dominando con una precisión admirable el lenguaje del pueblo llano. En fin, Lorca.

2.- El siguiente libro nos viene de tierras lejanas, pero de un hombre cercano. El Dalai Lama nos muestra en este libro los principales dogmas del budismo, así como los mejores métodos para controlar la mente a través de la meditación. Esta obra es un claro manifiesto en favor de la vida y la naturaleza y fiel a estos principios nos envía un mensaje de tolerancia hacia el resto de religiones y mantiene que el budismo sólo es budismo cuando se practica con la máxima voluntad. Creo que mucho deberían aprender los principales líderes religiosos de este señor y del budismo en general. Sólo de esta forma se podría alcanzar un equilibrio armonioso dentro del complejo mundo de las guerras santas.

El Dalai Lama es uno de los tibetanos que mejor conoce Occidente y a menudo se ofrece como puente entre ambos mundos. Lo más importante es que para leer este libro, no es necesario ser budista, como ocurre en mi caso, sino simplemente abierto a todos los pensamientos y filosofías que vertebran el pensamiento humano.

3.- El Pergamino Negro, a pesar de ser una novela y no un tratado de teología, ha sido uno de los libros que más me ha ayudado a forjar mi visión de la religión. Benigno Morilla nos cuenta cómo a partir de una farsa puede surgir una religión y subraya la importancia de un mito común que siguen todas las religiones, pero que sin embargo los creyentes de una religión no lo conciben así en la suya, y sí en el resto.

Es uno de esos libros que te enganchan hasta el final para después desvelarte la trama en las últimas diez páginas, logrando además un buen gancho comercial. A través de una historia que se mueve entre el siglo XVI y el XXI, el autor nos conduce a una reflexión acerca de la religión y la falta de juicio que mantienen hacia ella los creyentes pasivos. En definitiva, una novela muy interesante, con continuas alusiones a mitos de Mesopotamia y Egipto que nos tendrá atentos hasta la última página.

El curioso incidente del perro a medianoche

Esta magnífica novela escrita por Mark Haddon relata las vivencias de un personaje ficticio: Cristopher, unadolescente con síndrome de Asperger. El síndrome de Asperger da lugar a mucho debate, ya que algunos lo consideran como enfermedad y otros no. No obstante, todos los familiares de personas con este síndrome acaban derrotadas. Las personas que los sufren, son profundamente racionles, asociales y solo piensan lógicamente sin dejarse llevar por los instintos. Por ejemplo, le comunican la muerte de un familiar y no se inmutan, ya que, para ellos, todo lamento a una persona muerta es irracional.

Esta novela es recomendable a todas las edades. El personaje principal se refugia en las matemáticas para eliminar su inseguridad y, en el libro, se detallan todas las curiosidades y detalles de una forma milimétrica. Por ejemplo, como era el techo del tren y el estampado de la tapicería de los asientos.

El narrador está escrito en primera persona y es el propio personaje que decidió escribir el libro al descubir la muerte de un perro. El libro contiene muchas ilustraciones, planos de ciudades y de edificios e imágenes que hacen al lector partícipe de la historia.

Es un libro dividido en muchos capítulos (no se dividen por los numeros naturales como suele hacerse sino que por números primos), tiene 208 páginas y se lee rápidamente.

España puede salir de la crisis

Hoy escribo estas líenas para recomendaros un gran libro: «España puede salir de la crisis». José María Aznar realiza un repaso a toda la economía mundial pasada, presente y futura. Asimismo propone soluciones para salir de la crisis económica. Especialmente, en la última parte, se centra en España analizando comparativamente la situación actual con la situación de la crisis el 29 y da muchas esperanzas para la recuperación.

Cualquier persona que se sienta atraída por la Economía, Historia, Historia de la Economía, Política le recomiendo este magnífico libro. No solamente escribe de Economía sino todo lo que a ella le rodea: la familia, la globalización, el liberalismo, los países, la crisis de valores, la crisis social, la crisis política. Es un libro con un gran rigor ya que las opiniones personales no se incluyen en el mismo, un lenguaje muy sencillo y un libro de lectura cómoda y rápida.

Prólogo de libro: «el pensamiento específico»

       Antonio Vegas García, nos presenta su primer libro titulado “el pensamiento específico” en el que plantea una nueva forma de pensar para ser más creativo, más eficiente y, sobre todo, vivir con mayúsculas en un siglo XXI muy deshumanizado, muy consumista, muy competitivo y que afecta mucho al individuo. Una prueba es el progresivo aumento del índice de drogas, alcoholismo, suicidios y depresiones entre otras enfermedades.

        Este es un libro dedicado a todas las personas sin distinción de ninguna clase, pero dedicado especialmente a aquellas personas a las que les guste la reflexión. Además de ser un libro de filosofía de vida, es un libro que te ayudará a incluir en tu mente una nueva forma de pensar. Con estas páginas, adquirirás una nueva cosmogonía, es decir, un nuevo punto de vista de todo lo que hay, incluso podrás tener dos formas distintas de pensar, dos puntos de vista y, lo mejor, que los dos pensamientos se complementarán.

         Al ser un libro dirigido a todas las personas, se ha intentado que el lenguaje sea lo más claro y sencillo posible. Incluso lo más difícil se puede convertir en lo más fácil, la clave está en nuestro pensamiento como veremos. Asimismo, se ha optado por el método del ejemplo para comprender los conceptos con la máxima claridad posible. Para hacer todavía más fácil la lectura, se ha dividido el libro en varios capítulos que progresivamente se van complementando, es decir, leerte el primer capítulo es necesario para entender el segundo. Está basado en el aprendizaje de ciertos conceptos desde un punto de vista novedoso para ir formando una nueva forma de pensar y luego aprender a usar este nuevo pensamiento.  Muchos conceptos son usados muy bien por el ser humano sin darse cuenta, pero es conveniente que seamos conscientes de los conceptos ya que, a veces, podemos desviarnos.

         Este libro también destierra muchos tópicos y pensamientos que son perjudiciales tanto para la humanidad como para el individuo, así como fomentar el respeto y la creatividad. El libro gira en torno al autoconocimiento y al solipsismo, es decir, estar solo con uno mismo para ser felices y hacer felices a los demás. El libro está inspirado en el conceptismo, es decir, en la relación ingeniosa de conceptos para terminar formando un pensamiento.

Los no-conocidos.

Hoy me he vuelto a perder en el inmenso jardín de mis libros y ojeando uno de ellos me ha envuelto una agridulce melancolía.

En el último apartado de mi estantería, el más alto donde tengo a los poetas, elegí uno de mis libros favoritos de poesía Libro de oro de la poesía en lengua castellana pero en lugar de buscar ,entre su mas de 900 páginas, a los grandes (Quevedo, Lope, Garcilaso, Darío, Machado, Lorca…) decidí sumergirme en el mundo de los no-conocidos.

Los no-conocidos son aquellos poetas que pasan sin un nombre a la historia, aquellos de quién nadie nunca ha oido hablar. Pero sin embargo un soneto suyo puede confundirse a veces con uno del mismísimo Góngora. Cada vez soy mas adicto a estos no-conocidos, empezé a leerlos un poco por curiosidad, por ellos mismos. Pensaba en las horas que  habrían estado perfeccionando cada punto, cada coma del poema para conseguir lo que querían trasmitir, la ilusión con la que estos no-conocidos leyeron el poema recién acabado pensando que alguien algún día, los leyera y su nombre quedase escrito junto a los maestros del oficio. 

Dos de estos no-conocidos me han enamorado de su pluma, por estas delicias:

Metamorfósis.

Era un cautivo beso enamorado
de una mano de nieve, que tenía
la apariencia de un lirio desmayado
y el palpitar de un ave en la agonía.

       Y sucedió que un día,
        aquella mano suave
        de palidez de cirio,
        de languidez de lirio,
        de palpitar de ave,
se acercó tanto a la prisión del beso,
que ya no pudo más el pobre preso
y se escapó; mas, con voluble giro,
huyó la mano hasta el confín lejano,
y el beso que volaba tras la mano,
rompiendo el aire, se volvió suspiro.

Este madrigal romántico pertenece al poeta mexicano Luís Gonzaga Urbina, que pese a ser uno de los grandes de México de poco puede ser familiar el nombre a cualquiera que no tenga conocimientos avanzados de literatura.

Nace el sol derramando su hermosura,
pero pronto en el mar busca el reposo,
¡oh condición instable de lo hermoso,
que en el cielo también tan poco dura!

Llega el estío, y el cristal apura
del arroyo que corre presuroso;
mas, ¿qué mucho, si el tiempo, codicioso
de sí mismo, tampoco se asegura?

Que hoy eres sol, cristal, ángel, aurora,
ni lo disputo, niego, ni lo extño;
mas poco ha de durarte, bella Flora;

que el tiempo, con su curso y con su engaño,
ha de trocar la luz que hoy te adora
en sombras, en horror y en desengaño.

Este soneto pertenece a Diego de Torres Villarroel, otro nombre perdidos entre los años. Pero si me impresiona este poema es por algo, no sé si tendrá algo que ver o no pero ¿no tiene un inmenso parecido con éste otro de Góngora? casualidad o no, si es cierto que era un aférrimo admirador de Quevedo, por lo que dudo que sea precisamente el cordobés fuente de su inspiración. En todo caso, sobresaliente.

  Mientras por competir con tu cabello,
oro bruñido al sol relumbra en vano;
mientras con menosprecio en medio el llano
mira tu blanca frente el lilio bello;

  mientras a cada labio, por cogello.                   5
siguen más ojos que al clavel temprano;
y mientras triunfa con desdén lozano
del luciente cristal tu gentil cuello:

  goza cuello, cabello, labio y frente,
antes que lo que fue en tu edad dorada                  10
oro, lilio, clavel, cristal luciente,

  no sólo en plata o vïola troncada
se vuelva, mas tú y ello juntamente
en tierra, en humo, en polvo, en sombra, en nada.
                                                                                                         Góngora.

Seguro que tras estos no-conocidos, habite la esperanza de un joven poeta que aspira a dormitar algún día entre las miles de páginas de una antología poética, aunque solo sea un no-conocido. Psametiko.